Cap. 61:’The lucky one’

Les dio la idea y aceptaron. Estaban dispuestos a ayudarlo, porque era la primera vez que lo veía tan motivado para estar con alguien.
-Y le vas a cantar esa canción frente a todo el mundo que estará en ese lugar?.-Preguntó Peanut.
-Sí. Ya sé que estoy loco, pero que le voy a hacer.-
-Que seguro. Por lo menos es una buena canción.-
Siguieron ensayando toda la tarde, además de las canciones que estaban componiendo para su nuevo disco.
Ese concierto fue dos semanas antes del casamiento de Claudia. Todos fuimos a ver a Kaiser Chiefs en su concierto secreto para 200 personas. Caro y yo estábamos obligadas, claro. Estábamos junto con ellos esperando a que salieran. Notaba a Ricky más nervioso que de costumbre.
-Estas nervioso.-
-No más que otras veces.- Decía moviendo las manos.
-Ya muchachos, a trabajar.- Les dijo el manager. Salimos para que hicieran su ritual para salir a escena. Nos acomodamos al lado del escenario, donde está el técnico del tecladista. Salieron a escena y ahí estaban todos. Tocaron varios de sus canciones del primer disco y a modo de ensayo algunas nuevas. Todo el mundo lo veía como un show mas, pero yo notaba que Ricky estaba muy nervioso, y no se le quitaba, por mas saltos que diera, por más veces que se fuera a subir en la reja del público. No es el mismo que yo conozco. Caro le hacía señas a Nick para preguntarle que le pasaba, porque no había bebido de las cervezas que les dejan para que beban, solo agua. Nick como podía contestaba que no sabía, y también se preocupaba.
De repente escuchamos los acordes de una conocida canción. Era Pulp.
-Esta va dedicada a alguien que anda por aquí.- Se refería a mí y comenzó a cantar ‘Babies’. No quería creerlo, esto era una indirecta muy directa.
-Yo les dije que terminarían casados estos dos.- Decía Claudia.
-Qué? No! Como se te ocurre.- Para cuando vino el primer coro, solo me miraba. Nadie en el público entendía de quien hablaba, y buscaban entre los presentes. Muy pocos pudieron disfrutar la canción. Ya para el segundo se acercó un poco más a donde estaba yo, y me estaba poniendo nerviosa. No quería escuchar lo que seguía, quien sabe qué cosa diría.
Antes de comenzar el último coro se fue a mi lado, me tomó una mano, me llevó al centro del escenario, se arrodilló ante mí y cantó
-Oh, I wanna take you home, I want to give you children, and I could be your husband.- cambio la letra a la canción al final. Claramente ese gordito quería algo más.
-Oh por dios!!! Oh por dios!!!.- Decía Clau.-Dile que si, maldita sea!!!.- Y me gritaba. Obviamente no escuché nada.
En un acto casi sin razonamiento alguno me agaché para besarlo. Yo sabía que estaba loco, pero esto era demasiado. Él que siempre había dicho que mantendría su vida privada en secreto y ahora estaba pidiéndome matrimonio frente a público. Fue lo único que hicimos.
-Eso es un sí?.- Me preguntó al oído cuando me abrazaba, y me llevaba hasta un lado del escenario, donde estábamos. El resto de la banda y el público aplaudían la escena.
-Sí, es un sí. Aunque no quiera.-Pude responder cuando ya estábamos lejos de la vista del público. Nuevamente lo besé. Ahora si se merecía tanto beso, por ser tan valiente. Mientras tanto la banda comenzaba con los acordes de su última canción de la noche.
-Debo volver. Termino esto y seguimos.- Nos despedimos y corrió a cantar nuevamente. El público lo aplaudió nuevamente por lo que había hecho. Cantó un muy especial ‘oh my God’, por lo que dice el coro. Cuando terminó pidió que no dijeran nada a nadie, que sería un secreto entre ellos y nadie más. Pobre iluso.
-Es que no quiero creer lo que acaba de hacer ese gordo.- Decía Caro que era abrazada por Nick.
-Yo tampoco. Cuando nos contó no quisimos creer, pero lo hizo. Esa mujer lo tiene loquito al pobre.-
-Ni que lo digas. Mira, aquí viene.-
-No es lindo que ahora se vayan a casar ustedes?.- Decía Claudia. Su sueño estaba casi hecho realidad. Ricky llegó a saludarnos.-hasta que te decidisteis, no?.-
-Era algo que tenía que hacer, tarde o temprano.-
-Y lo hiciste temprano. Bien hecho panzón. -Decía Gustaf estrechándole la mano.
-Gracias muchachos.-
-Y cuando es la fecha?.-Dijo Claudia. Ahí nos quedamos paralizados los dos. No sabíamos que responder.-No se miren así, tienen que responderme algo. Cuando? Cuando?!?
-No sé. No lo tenemos ni decidido.- Decía Ricky.
-Deberías dar gracias a que dije que si.- Dije.
-Claro, podría haber dicho que no, y todos tristes. Déjenos en paz un momento. Contraigan matrimonio ustedes primero!!.- Decía el Gordo. Pobre, ya estaba estresado.
Nos retiramos del lugar, los Norén se fueron directamente a Londres, no era tan tarde y podían volver con calma. Nick y Caro se fueron a su casa, no sin antes ser abordados por los fans que esperaban afuera del recinto.
-Nick, no quiero firmar cosas hoy.-
-Por qué? Solo tienes que salir, firmar un par de discos, un par de fotos y ya está.- Trataba de hacerle notar que no era tan malo.-No creo que lo digas por Eve.-Lo miró e hizo un par de muecas.- No se va a poner celosa porque sabe perfectamente lo que haces. Ya vamos.- Lo hizo salir aunque no quería. Yo esperé con Caro a que la masa bajara un poco, aunque no era mucha gente. No queríamos que nos vieran.
-Y quien es ella Ricky?.- Le preguntó una fan
-Una amiga.- Respondió así como si nada. Es buen actor.
-No te creemos.-
-Lo sé. Pero no les diré más porque esas cosas no las voy a contar. Quizás no ahora.-
-Te lo cobraremos cuando te volvamos a ver. Gracias!!.- Se tomaron una foto y se fueron. Cuando ya no quedaba nadie fue hacia donde estaba hablando con Carolina.
-Eve, nos vamos?.- Me ofreció su brazo. Le tomé el brazo, nos despedimos de la gente y nos marchamos a su casa. No quisimos hablar del tema, quizás porque fue tan repentinamente que ‘estábamos en shock’.
Otro amanecer en una ciudad distinta. Cata se levantó para abrir las cortinas y ver cómo era la capital italiana por la mañana, aunque con eso molestara a Björn que aun dormía.
-Björn levántate!.- Dijo tirándose a la cama para despertarlo.
-No, Cata. Cinco minutos más.- Se tapó la cara con las sabanas.
-Pero Björn!! Quiero salir, el día está hermoso! Y tenemos que volver en tres días más, para el casorio de Claudia.-
-Ven, acurrúcate un rato a mi lado y me levanto.- Abrió un poco la ropa de cama y le hizo espacio para que se acostara nuevamente al lado de él.
-Pero yo quiero salir!!.- Decía, acostada al lado de él.
-Pero primero disfruta estos momentos en cama, durmiendo, haciendo nada. Después no tendrás tiempo para nada.- Le decía Björn aun con los ojos cerrados y abrazándola.
-Pero quiero salir.- Insistía.
-Si sigues así me divorcio!.- Le advertía. Por lo menos había logrado abrirle los ojos.
-Esas amenazas no me asustan! Ya, levántate y vamos.- Lo había logrado después de tanta insistencia.
Fueron por su desayuno a los comedores que están en el primer piso del hotel, no querían pedirlo a la habitación, si no, no salían. Como ya no era verano salieron un poco mas abrigados, polerones y pantalones largos, Björn agregó una chaqueta, y para ambos lentes, pues el sol pegaba fuerte.
-Ponte bloqueador en la cara.- Le decía Cata y sacaba el pote de su bolso.
-Para qué?.-
-El sol está pegando fuerte y no quiero que en la noche te estés quejando porque te arde la cara.-
-Tan preocupada que eres. Deja sentarme aquí.- Le dijo. Se sentó en una banca que había mientras caminaban por las calles de Roma.
Para cuando ya estaban listos pudieron partir a recorrer. Todo el día viendo antiguas edificaciones romanas, incluso llegaron al coliseo romano, pero solo pudieron verlo desde lejos, no quisieron cruzar a la otra acera, porque el tráfico lo impedía. Pero al menos podría decir que ‘estuvo a metros del coliseo romano’. También se tomaría una foto con él (el coliseo) de espaldas. Todo un recuerdo para cuando estuviera muy ancianita y les contara a sus nietos que se casó con un músico muy guapo y que la llevó a recorrer el mundo. Pasearon toda la tarde por distintos lugares históricos, por ferias que encontraban por el camino, donde compraban cosas para decorar su casa nueva. Cuando se hizo de noche salieron a comer, y vuelta al hotel temprano, pues debían dormir y despertar temprano para tomar otro vuelo, del cual no tenían pasajes, para ir a Milán. A última hora decidieron hacer el viaje por tren. Los del hotel les dijeron que no era tan caro y no se demorarían mucho tampoco.
-Gustaf estoy nerviosa.- Le decía mientras cenaban viendo una película en la televisión.
-Por qué?.- Dijo con la boca llena.-
-Primero, no hablas con la boca llena. Segundo, por todo esto de nuestra boda, me tiene el estomago revuelto y con las manos temblorosas.-
-Segura que es esto del matrimonio que tienes el estomago revuelto y no otra cosa?.-
-Ay tonto!!, que mas puede ser?.- Gustaf se encogió de hombros.-No pienses anda de eso porque no lo es. Son los nervios.-
-Está bien, son los nervios. Aunque no te creo mucho.-
-Ya basta! Cambiando de tema, nos falta algo mas por arreglar antes de ese gran evento?.-
-Que llegue Björn y tu amiga.-
-Además de eso?.- Seguía preguntando, quería que todo saliera perfecto.
-Creo que nada mas.- Notaba que estaba un poco ansiosa y nerviosa por eso.-Tranquila, va a salir bien.-
-Y nuestra luna de miel?.- Preguntó
-Cual luna de miel? Nosotros nos casamos y me voy de gira.- Seguía comiendo, así como si nada.
-Qué?!? Como que no tendremos luna de miel?!?!.- Decía. No se esperaba la sorpresa de Gustaf, que se levantó de donde estaban.- No te vayas Erick Gustaf Norén!! Estoy hablando contigo.- Obviamente no le hizo caso y se levantó. Se demoró un rato y volvió con unos papeles.- Y esto?.-
-Léelo.- Le dijo con una sonrisa en la cara.-
Comenzó Claudia a leer el contenido de esos papeles. No estaba muy convencida de leerlos, pero pasó de tener un seño fruncido a una cara de felicidad. Era como si eso no pudiera estarle pasando a ella.
-Esto no es verdad.- Decía cubriéndose la boca en señal de no creerlo.
-Es verdad. Ahora.- Le pasó un lápiz.-Tienes que firmar para que puedas salir de tour con nosotros como la fotógrafa que eres. Te pagaremos un sueldo muy parecido al que tenias en esa revista en donde trabajabas, de hecho creo que es un poco más. Bienvenida a bordo, Claudia Cooper.- Le estiró la mano.
-Gracias Gustaf Norén.-
-De nada.- La besó.- Por eso no tendremos luna de miel, porque tendremos varios meses para estar juntos, aunque gran parte del tiempo esté preocupado en otras cosas.-
-Pero no creo que pueda acompañarte toda la gira. Recuerdas de esa exposición que te dije que realizaría?.-
-Si.-
-Pues, será en Febrero próximo.- Dijo un poco triste.
-Pero estarás conmigo hasta Enero, y está bien.- Suspiró.- Me siento tan afortunado.-
-y por qué tanto?.- Preguntaba, de curiosa.
-Porque todo está saliendo mejor de lo que pensaba. Tu no?-
-Ay qué lindo. Sabes, yo también pienso lo mismo. Juraba que después de que me despidieron en NME estaría sola, sin dinero y viviendo bajo un puente.-
-Pero no pasó, y es todo lo contrario.- Terminada la frase le dio un abrazo.- Vas a terminar de comerte eso?.-
-Sí. Quedaste con hambre?.-
-Un poco.-
-Oh, qué mala suerte, no te daré nada!.- Le dio la espalda llevando con ella el palto. Podías pedirle cualquier cosa a Claudia, menos comida, porque como dicen en mi casa ‘con la comida no se juega’. Es una regla inquebrantable.