lunes, 1 de febrero de 2010

Cap. 3: “Disco 2000”

Cuando volteé y me puse a caminar hasta la mesa con mis amigos y compañeros de banda, un tipo chocó conmigo, lo que hizo que mi vaso se volcara en la manga de mi hoody, el cual quedó con un no muy agradable olor a alcohol.
-Idiota. Por qué no te fijas por donde caminas.- Le dije un poco alterada.
-Lo siento, lo siento. No te vi. Es que, eres muy bajita para ser Inglesa.-Dijo el tipo como queriendo ser simpático.
-En serio? Jamás había notado mi estatura.- Dije sarcástica y comencé a caminar hasta mi mesa, después de ese accidente, ya no tenía ganas de quedarme. No si existía gente así.
-Oye, espera.-Dijo tomando mi brazo.- Discúlpame nuevamente. Soy torpe de nacimiento. Y tampoco quería hacerte sentir mal. Deja comprarte otro tra….- Decía, pero lo interrumpí.
-No te preocupes, ya me voy.- Le dije- Gordo idiota.- Maldecía mientras me marchaba
Debía pasar a la mesa de donde estaban los chicos, recogí mi bolso, mi chaqueta, les expliqué lo que había pasado, ellos se molestaron y me dijeron que por que no había hablado con ellos para defenderme. Simplemente les dije que no era necesario. Al final de cuentas, eso de salir a tomar a un bar, no de mala muerte, no era lo mío. Me retiré del lugar y tomé rumbo a casa. Paré en un par de lugares para comprar gaseosa, algo para comer y un videojuego. En eso mataría lo que quedaba de noche y el mes que en el cual debíamos esperar a que la mezcla del disco estuviera lista. Aun faltan unas ocho semanas para lanzarlo, asique tenemos tiempo de sobra.
Estando en mi casa, después de cambiar mi ropa alcoholizada por una limpia, me tiré en el sofá frente a la televisión. Mr. Bean es una buena compañía, además de ser mi serie favorita, al igual que Dr. Who. Miraba el capitulo en que Bean salía de compras, y llevaba muchas cosas en su chaqueta, las cuales ocupaba para probar las cosas que compraba. Amo ese capítulo. Después venia uno en el cual estaba en una parada de autobús y al señor que estaba a su lado le daba un ataque de epilepsia o algo así.
Mientras veía esa serie, comencé a recordar al tipo del bar. Tenía la sensación de haberlo visto antes. Pero era un poco difícil de saber, era como la mayoría de los ciudadanos Británicos: Piel blanca, cabello rubio, ojos claros. Eso no me decía mucho. En fin, tampoco quería darle más vueltas al asunto, asique mi cama me esperaba para darme una noche más de paz, tranquilidad y comodidad. Aun no era tarde, pero debía levantarme temprano para ir a mi trabajo y poner mi cargo a disposición. Ya no necesitaba trabajar en eso, por un tiempo, asique debía renunciar.
Jamás había visto a mi jefe tan shockeado como ese día. Esta sorprendido por mi renuncia. No quería perderme, según él, porque había sido una de sus mejores diseñadoras. Pero no tenía otra opción. Terminó por aceptar mi renuncia y decirme que si, por algún motivo la música no me daba los dividendos necesario, me re contrataría sin pensarlo dos veces, cosa que le agradecí.
Me marché con las cosas de mi oficina en una caja, entre la tristeza de mucha gente. Todos me desearon éxito en este nuevo proyecto. Un par de personas era felices de que yo me fueran. Típicos seres humanos que no toleran a la gente más exitosa que ellos, pero a mí poco me importó.
El resto del día fue básicamente mirar televisión y jugar con mi gato. Durante la tarde recibí una llamada de nuestro manager diciendo que lanzaríamos el primer single la próxima semana, asique debíamos hacer una pequeña presentación en una radio. Hablé con los chicos y estaban muy emocionados.
Lamentablemente el tiempo pasa volando, los nervios me tenían mal, asique no pude disfrutar el resto de semana y esa presentación llegó. Era en la mañana. Nos hicieron la entrevista de siempre, esa que le hacen a todo el mundo: donde nos conocimos, que hacíamos antes, nuestras referencias musicales, nuestros ídolos, el tipo de música que tocamos según nosotros, etc. También tocamos un par de canciones en versión acústica, continuaron más preguntas y todo terminó. Nuestra prima experiencia en el medio había sido exitosa, y no tan traumática como habíamos pensado que seria.
En la tarde el estudio de diseño encargado de cómo luciría el disco había mandado el trabajo final. Necesitaba nuestra aprobación. Según yo, que era la más preparada para esto, estaba hermoso. La portada tenía un fondo de color celeste, había una nube, de la cual caían gotas de lluvia y por detrás de la nube se asomaba un sol, y había también una sombra que era el hombre del tiempo. Asique fue aceptada inmediatamente. Finalmente todo estaba listo para lanzar el disco, titulado “Reporting from the London Downtown”.
Ahora solo falta hacer el lanzamiento oficial, agendado para el miércoles en la noche, en una tienda de Virgin. Eso me tenía emocionada. El lanzamiento seria en una de las tiendas de música más prestigiosas del mundo, no podíamos estar más animados y felices por este acontecimiento
En la tienda había un lugar asignado para que firmáramos los discos, y estaban nuestros instrumentos también, asique supusimos que debíamos tocar, nadie nos había dicho nada, pero no nos importó. En las afueras de la tienda había una pequeña fila con fanáticos nuestros. Según estimaciones de los encargados de la tienda, eran unas 70 personas, y el número seguía aumentando. No estaba segura de si era real o una especia de sueño, pero si lo era, estaba dispuesta a continuarlo.
La gente comenzó a entrar, ya eran unas 100 personas, si es que no eran más. Nos hicieron pasar y nos sentamos en nuestros instrumentos.
-Buenas noches, gente que está dentro de esta tienda, y los que no pueden entrar. Somos ‘The Weather man repot’ y este es nuestro primer álbum.-Les dije a los presentes.
Comenzamos a tocar las canciones del disco. En medio del concierto divisé a Catalina y a Carolina, muy entusiasmadas cantando, y en primera fila, detrás de una cámara, trabajando para NME esta Claudia. La gente cantaba las canciones que estaban en el EP que habíamos lanzado hace unos meses, que había sido todo un éxito, por cierto. Más de 500 copias vendidas, todo un éxito. Tal parece que somos buenos en esto. Terminamos nuestro mini concierto con ‘Like a Rolling Stone’. La gente presente quedo muy impresionada y satisfecha con lo que había escuchado. Nosotros nos fuimos a un lugar en la parte de atrás de la tienda, para darle espacio a la gente para que compre su copia del disco y haga la fila para firmarlo. Mi primer problema, no sé cómo hacer un autógrafo. Deben entenderme, soy nueva en esto. Después de practicar un poco, el definitivo era mi nombre un poco desordenado, así de simple.
Nos avisaron que ya había gente haciendo fila para firmar, asique caminamos hasta la mesa y nos sentamos. La gente era muy cordial. Todos nos felicitaban, decían que teníamos un gran talento, que continuáramos así. Incluso las chicas cuando me tocó autografiarles el disco!. Por eso las quiero tanto.
Solo puedo concluir con que fue una noche redonda, y que hasta el momento la vida me sonreía. Todo era felicidad, suponía que nada podía ser mejor. Obviamente estaba equivocada.

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