viernes, 12 de febrero de 2010

Cap. 15: “Dinner At Eight” Parte 1.

Escuchamos por lo altoparlantes que podíamos bajar del barco, el paseo había terminado. Fue bastante largo, pensamos que sería un paseo de un par de cuadras y nada más, pero nos sorprendimos a ver que duró algo así como dos horas y un poco más. Nos juntamos todos nuevamente a la salida del tour. Las chicas ya estaban abajo, aun riendo de las locuras que conversaban. Caro venia tomada del brazo de Nick, seguían hablando, de no se que cosa, quizás seguían lanzándose cumplidos. Nosotros veníamos con las manos en los bolsillos atrás de ellos.
No queríamos irnos, pero debíamos sepáranos. Ellos se iban en la mañana, y yo debía tocar en la noche, y las chicas me acompañarían a la prueba de sonido y el show en la tarde, no tendríamos tiempo para nada. A ellos los fueron a buscar en una pequeña van. Se despidieron de nosotras, se subieron a su auto y partieron a su hotel. Nosotras nos fuimos caminando. Nos gustaba caminar.
-Ustedes dos fueron las que mejor lo pasaron en este paseo por Paris. No se vale.- Reclamó Claudia.
-Sí, no es posible. Cuando nos tocará a nosotras? Ah?.- Se le unió Catalina
-No es nuestra culpa que nos encontráramos con ellos.- Dije en nuestra defensa
-Tampoco que ellos quisieran hablarnos.- Agregó Caro.
-Y por qué se molestan?.- Preguntó Fer
-Nosotras molestas? Por favor.- Dijo Caro………. Molesta
-No estamos molestas, o quizás un poco pero no es hora para esto, esta helado y en cualquier momento se pone a llover.- Dije, queriendo cortar la conversación
-Sí, mejor nos vamos. Mañana será un gran día.- Dijo muy convencida Clau.
Nos fuimos caminando hasta el hotel, no estaba tan lejos, asique no era problema. No hablamos nada en el trayecto, por lo menos Caro y yo, que estábamos como embobadas. Extraño pero era lo que estaba pasando. Las insistían que algo estaba pasando, o que algo pasaría entre nosotras y esos chicos. Según ella no era normal que en un solo día nos aisláramos con un par de desconocidos para hablar con ellos. Amor a primera vista insistían ellas.
Estábamos tan casadas después de tanto caminar y recorrer los lugares más bellos de lo que hasta ahora conocíamos de Francia que ni siquiera nos quedamos conversando como siempre lo hacemos cuando nos juntábamos, asique pusimos las cabezas en las almohadas y nos dormimos.
En la mañana despertamos un poco atrasadas. Ni un hubiera sido por mis compañeros de banda que llamaron a mi móvil para despertarme, todavía estaría todavía estaría enredada en las sabanas de ese hotel. Despertar a las chicas no fue un gran problema, estaban medias despiertas después de escucharme hablar. Asique en un dos por tres estábamos vestidas y listas para partir al lugar donde realizaría el show. A mitad de camino nuestro manager recibió una importante llamada. Nos miraba con cara de asustado mientras hablaba. Cortó su teléfono y nos informó.
-Chicos, se cancela el resto del tour. Será su primer y único show por Europa.- Nos dijo
-Qué? Por qué? Osea, como?.- Dije sorprendida.
-Osea, no es el último. Ese será en Suecia, en cuatro días más y abrirán para una banda local llamada Mando Diao. Y se suspende por el clima.- Respondió
-Pero aquí el clima está bien.- Dije
-Aquí está bien, y en Suecia. Pero en el resto de Europa hay cortes de energía, cañerías congeladas y vuelos cancelados. Asique, como no podemos tomar un avión, debemos hacer este recorrido por tierra en auto. Y no te estoy preguntando si quieres, debes, no hay vuelta atrás Eve.- Me contesto.
Ya me había molestado. Ahora sí que quería llegar a casa lo antes posible.
En el lugar del show tenían nuestros instrumentos en el escenario. Lo primero que hice fue dirigirme a ese lugar para hacer la prueba de sonido lo antes posible. Ya no quería tocar. Las chicas me acompañaron. Las niñas fotógrafas comenzaron su trabajo. Cata y Caro se quedaron en un extremo del escenario mirando todo.
Todo fue como los anteriores soundchecks, que subir un poco esto, bajar aquello, cambiar cuerdas, tonos de guitarras, bajos y tantas otras cosas que hay que hacer. Después de eso, simplemente había que esperar. En la espera salimos a almorzar. Un restaurant de comida rápida que estaba en la esquina era la única opción. Pedimos nuestras ordenes y buscamos una mesa en el segundo piso. Ahí nos quedamos a ingerir nuestra comida.
-No estás nerviosa?.- Preguntó Caro.
-No.- Respondí
-Mentira, es imposible que no estés nerviosa. La última vez que te vimos tiritabas de pies a cabeza.- dijo Cata
-Ahora no estoy nerviosa, quizás más rato me entre el nervio.- Seguí respondiendo.
-Y que te dijo el manager?.- Otra pregunta, ahora venía de boca de Clau
-Que en cuatro días más tocamos en Suecia y nos vamos a casa de vuelta.- Dije
-Y no que debíamos ir a otros lados?.- Exclamó Fernanda, preocupada.
-Debíamos?.- Dijo Caro
-También soy parte de la banda, bueno?. No tocaré algún instrumento, pero me pagan para tomarles fotos.- Contesto riendo.
-Sí, debíamos. Por culpa del clima solo podemos llegar hasta Suecia para abrir para Mando Diao. Jamás podremos hacer un show solos como una banda decente.- Dije, y Clau se atoró con su comida después de escuchar el nombre de la banda a la cual abriríamos.
-A Mando Diao dices?.- Dijo
-Sí. Por qué?.- Pregunté
-Es que son buenos. Me gustan muchos.- Contestó.
-Momento. Por qué te atoraste al escuchar el nombre de esa banda?.- Preguntó Catalina.
-Sí. Que escondes mujer?.- Preguntó Caro.
-Yo? Nada. Es que me sorprende que abran para una banda tan buena.- Respondió, pero era obvio que algo más nos debía contar.
-Mentira. Puedo apostar que algo pasó.- Dijo Cata
-No recuerdan que nos contó que el vocalista, el alto rubio, le había pedido que la ayudara a comprar no se qué cosas en la tienda favorita de Eve?.- Dijo Caro
-Sí, verdad. Nunca nos terminó de contar que pasó después de la sesión de fotos.- Dije.
-Igual que otras que no contaron nada de sus viajes. Pero no necesitamos saber nada porque ya lo vimos todos.- Dijo Caro
-Oye!.- La codee.
Y la obligamos a que nos contara lo que había pasado después de esa sesión fotográfica.
Pasó que, al otro día, cuando llegaba a su oficina, la recepcionista del edifico de NME le tenía una pequeña carta que había llegado en la mañana muy temprano. El sobre decía para ‘Ms. Cooper’, sin remitente. Extrañada Claudia se fue a su escritorio y la abrió. El contenido no era muy largo, y simplemente decía: “Aun no sé como agradecerte el que nos salvaras de un fracaso seguro. Nos quedamos hasta el viernes, si tienes tiempo y se te ocurre algo, avísame. Este es mi correo.” Nuestra pobre amiga quedó anonadada, no sabía qué hacer. Si era correcto mandarle un correo electrónico indicándole el día, la hora y lo que podían hacer, por lo que ella se había enterado, él era casado. Pero por otra parte, él quería agradecerle la ayuda de alguna forma. Asique sin pensarlo mucho, respondió, indicando que podía ser una cena, en un elegante, y no muy concurrido restaurant ubicado en el centro de Londres. A los pocos minutos llegó la respuesta: Jueves, una cena a las ocho de la noche.

2 comentarios:

  1. O_____________O
    Oh por Dioooooos! Me estoy haciendo xDDD
    Eveeeeee!!! No la puedes dejar ahí, exijo segunda parte! Aaaaaaah!!! ;B ;B xD

    '... si tienes tienpo y se te ocurre algo, avísame.'
    Oh por Dios, se me ocurre todo lo que él quiera xDDD
    Y todas ustedes son unas sapas xD
    Está genial :D

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  2. Yo tb quiero un amoriooo!!! xDDDD
    Por qué solo ustedes???!!!!


    xDDD
    Me rei caleta, esta muy buena la historiaaa... quiero más historia, más!!! xDDDD

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