miércoles, 24 de febrero de 2010

Cap. 20. ‘A Place Call Home’

Al parecer tenían razón. El público era muy generoso. El mas enterado de lo que, hasta esa fecha, habíamos hecho, que era nuestro disco, los covers, incluso nos atrevimos a tocar un tema que era parte de nuestro primer EP, y ellos lo sabían! Me sentía como en otra dimensión. Ni en mi país de origen la gente sabía tantas canciones. Definitivamente ya habíamos descubierto nuestro lugar favorito para tocar. Las frías tierras Suecas.
Terminamos. Felicidad había entre nosotros. Ya había pasado nuestro momento, era turno de los dueños de casa. Una potente banda. Se notaba que ya tenían un gran sequito de fanáticos. Pero claro, era tan obvio, sus canciones eran tan potentes, con mucha energía, que nos contagiaron a nosotros también, a pesar de que no son de ese tipo de bandas en la que el vocalista salta de un lado a otro al mismo tiempo que canta, pero eran potentes. Me tenían impresionada. Una nueva banda favorita se anotaba a la lista de todas.
Cuando terminaron, fuimos a felicitarlos. Claro que después de que ellos nos dejaran pasar. Ritual de ellos, lo más probable. Después de eso nos queríamos venir, menos dos que se querían quedar.
-Yo me voy. Estoy muy agotada.- Dije tomando mis cosas
-Sí, yo te acompaño, no tengo nada que hacer aquí.- Dijo Caro y se unió a mí caminar. Y en verdad no teníamos nada que hacer, ni siquiera en Suecia. Ya teníamos ganas de volvernos a Inglaterra, pero eso no sería hasta mañana en la noche. Gracias a los anuncios meteorológicos, la nieve no caería más y los aeropuertos serian reabiertos. Toda una lástima, tomando en cuenta lo bien que a mi banda nos habían recibido. Pero también debíamos volver, teníamos que volver a nuestros trabajos. Bueno, yo no.
Antes de abandonar el recinto, los chicos, amablemente nos ofrecieron una despedida. No salir de parranda o algo parecido, sino más bien un almuerzo, algo pequeño para despedirnos. Aunque era más para despedir a dos en particular que a nosotras cinco en conjunto. Pero bueno, el resto de la banda se veía bien agradable.
Nos fuimos todos juntos, las parejitas habían llegado juntas y las fueron a dejar a la puerta por turnos. Eso me recordó lo que había pasado en EU con Ricky. Extrañamente lo extrañaba. Y recordé también responderle el mensaje de texto que había recibido de él.
En la tarde, después de nuestras rutinarias mañanas (Despertar, duchas, arreglos de ropa, discusiones por perdidas de algunos accesorios, desayuno, reposo, tv, llamados telefónicos entre otras cosas) nos llamaron de la recepción del hotel, avisando que un grupo de jóvenes nos esperaban abajo, pero que antes de que saliéramos, dejáramos todas nuestras cosas ordenadas, para que no nos atrasáramos en tomar el avión que nos llevaría de vuelta a Londres. Eran hombres preparados, todo lo tenían listo. Asique bajamos y nos fuimos con ellos a almorzar. Antes de eso, el recorrido por las calles. Eso sí, no nos llevaron caminando, como habría sido lo ideal, si no que en el transporte público, para ahorrar tiempo y para salir de lo típico que es una caminata y todo lo que eso incluye.
El autobús era lindo. No parecido a los que tenemos en Londres, esos de dos pisos, muy típicos, pero estos también tenían su encanto.
Fue un no muy ligero almuerzo. No estábamos en un restaurant muy elegante, pero si muy acogedor. Para almuerzo ordenaron Pyttipanna, que estaba deliciosa, necesitaba la receta para hacerlo en casa, cuando me bajaran las ganas de cocinar, acompañada con una gaseosa.
-Quiero hacer un brindis.-Dijo Björn tomando su vaso.-Para despedir a estas personas, que aunque las conocemos hace un día, las extrañaremos. Sobre todo a un par.-
-Que sigan con mucho éxito en sus vidas, y que nos visiten otra vez.-Agregó Gustaf.
Fueron muy amables y cariñosos. No recuerdo bien que fue lo que los otros miembros de la banda dijeron, pero fue lo mismo al fin y al cabo. Terminamos de comer entre risas, gracias a las anécdotas que contábamos. Para postre, nos recomendaron el Ostkaka, una especia de pastel de leche. Continuamos hablando.
Lamentablemente todas las cosas buenas tienen un final. En esta ocasión, estábamos por finalizar nuestro recorrido por Europa, nos devolveríamos a casa. Nos llevaron al hotel nuevamente, ahora para despedirnos. Ellos también se retiraban, pero era más fácil, un viaje de un par de horas en auto hasta su ciudad natal, no uno en avión, que tiene lo engorroso de la policía internacional, verificaciones varias, revisiones de equipaje, esperas, retrasos. Se despidieron de nosotras y subimos. Clau se quedó atrás un momento.
-Prométeme que si vuelves me avisarás.-Le dijo Gustaf
-Claro. Necesito un guía turístico.-Le respondió.
-Dalo por hecho.-Aseguró, y le agregó un guiño del ojo izquierdo. Se abrazaron en forma de despedida. Una que obviamente no seria para siempre.
Lo mismo pasó entre Cata y Björn.
-Que gusto conocerte, pero un lamento que fuera de esa forma tan brusca.- Le dijo él, con carita de perro degollado.
-El gusto es mío. Solo espero que la próxima vez que nos veamos no choquemos. Porque habrá una próxima vez, no?.- Dijo Cata.
-Por supuesto!! Estas cordialmente invitada a pasar tus vacaciones con Björn Dixgård, tu humilde servidor.- Dijo haciendo una reverencia. Se despidieron. Nosotras ya nos íbamos.
Dejamos el hotel atrás. Estábamos unos metros más cerca de Inglaterra ahora. En el aeropuerto comenzamos a dejar atrás estas frías tierras, en donde Clau y Cata habían encontrado nuevas ‘amistades’ y yo me había llevado la sorpresa de mi vida.
-No me quiero ir.-Dijo Claudia.
-Yo tampoco.- Siguió catalina
-Yo sí, asique nos vamos.-Dijo Caro, como intentado hacerlas despertar del transe en el que estaban.
Abordamos el avión. Próximo destino, Londres. Nuestra ciudad.
Cuando llegamos, nosotras también nos despedimos. Después de varios días juntas, nos dio pena separarnos. Pero debíamos hacerlo, teníamos que volver a nuestra rutina. Bueno, ellas, yo debía descansar y ver que seguía después. Un taxi para cada una. Nuestros hogares nos esperaban. Nuestras camas, baños, cocinas, esperaban para atendernos nuevamente. Estábamos felices por recorrer lugares nuevos, satisfechos nosotros como banda, como equipo de hacer un par de shows de primer nivel. Todos satisfechos. Podíamos relajarnos en el tiempo que nos quedaba. Lo que habíamos vivido era solo la punta del iceberg.

2 comentarios:

  1. Ahahahaahahahah
    "Estas cordialmente invitada a pasar tus vacaciones con Björn Dixgård, tu humilde servidor."

    Es que con esa frase me mori ahi mismo!!! xDDD
    Está muy buena, adelanta capitulos para llegar luego a las vacaciones con Björn xDDDDDD

    ResponderEliminar
  2. Nooooooooooo :( Me separaste de Gustaf :(
    Yo que la estaba pasando tan bien ahí por Suecia y por los rincones xD

    'Eso me recordó lo que había pasado en EU con Ricky. Extrañamente lo extrañaba'
    Te haci la tonta xDD

    '-Prométeme que si vuelves me avisarás.-Le dijo Gustaf'
    Te prometo lo que quieras xDD

    '-Dalo por hecho.-Aseguró, y le agregó un guiño del ojo izquierdo.'
    Me hice pis O__O

    'Solo espero que la próxima vez que nos veamos no choquemos. Porque habrá una próxima vez, no?.- Dijo Cata.'
    Ajajaja suelta xDDD

    'Estas cordialmente invitada a pasar tus vacaciones con Björn Dixgård, tu humilde servidor.- Dijo haciendo una reverencia.'
    La Cata se nos desmaya D:

    '-No me quiero ir.-Dijo Claudia.
    -Yo tampoco.- Siguió catalina
    -Yo sí, asique nos vamos.-Dijo Caro'
    AJAJAJAJAJAJA xDDDDDD

    Exijo reencuentro con Gustaf xDD :D

    ResponderEliminar